Una copa más


Por Reinaldo Grimán


Una copa más, así comienza el descontrol. Desde tiempos remotos se ha conocido la bebida alcohólica y desde que se descubrió se ha abusado de ella, tanto así que hasta existió un dios para la misma, Dionisio, dios del vino, inspirador de la locura ritual y el éxtasis en la mitología griega, ya desde aquellos tiempos el desenfreno y el frenesí ha sido eje de admiración humana y al volver a nuestra era nos damos cuenta que nada ha cambiado, el alcohol y la locura sigue bien ubicado en la vida cotidiana. El ser humano ya es conocedor de los efectos nocivos del licor sobre la salud del mismo pero hace caso omiso a los mismos y consume alcohol hasta que su cuerpo no es capaz de aguantar más, de muchos es el caso de “yo sé cuando parar” o “yo solo estoy HAPPY, no hay de qué preocuparse”, ¡patrañas y mentiras!, son solo excusas de las personas para tomar descontroladamente y al día siguiente poder decirse los unos a los otros “de verdad no sé que me paso, yo no suelo tomar así”, para así sentirse bien con ellos mismos y mantener una imagen falsa la cual se destruirán los unos a los otros a sus espaldas; de este punto de libertinaje solo hay un paso al alcoholismo, uno de los principales fundadores del escoyo que son los vicios. Las personas suelen defender a los alcohólicos pues dicen que tienen motivos para serlo y no se les debe criticar sino mas bien ayudar, pero para aquellos que piensan así les aconsejo no ser tan superficiales, ya que son contados los casos de quienes quieren salir de su problema, la mayoría de ellos son felices así aunque no lo crean, prefieren vivir en su mundo, huyendo de la sociedad, de los problemas y todo lo que vivir conlleva, son simples parásitos que han perdido su esencia y que no hacen nada más que causar problemas, admirables en cambio son aquellas personas que se mantienen sanas todas sus vidas y más aún aquellos que han logrado salir de ese estado, las personas podemos estar toda la vida tratando de ayudarlos pero les aseguro que será inútil, todo depende del sujeto problema, si él no quiere salir de su miseria y su inmundicia no lo hará, más ¿cómo no llegar a este estado de degeneración?, si en la sociedad donde vivimos ha llegado a un punto de descaro y cinismo increíble, donde se dice que beber es nocivo para la salud pero vemos niños de hasta 8 años consumiendo alcohol, donde todas las reuniones sociales, fiestas, paseos, viajes y similares deben incluir bebidas alcohólicas para ser catalogado como buenos, donde cada vez más se incentiva a un consumismo suicida y en donde si tu no tomas eres un cero a la izquierda o un “bicho raro”, ¿cuán más bajo se puede caer? La respuesta a eso es “NO lo sé”, mas estoy seguro de que la raza humana puede dar la sorpresa hundiendo más aún este mundo y esta vida hacia el caos y la autodestrucción. Al final la vida es una sola, es verdad, pero esta de nuestra parte decidir si hacerla plena o “vivir” como si no hubiera un mañana, tú eres quien elige, y tienes la opción de ser uno más o no pedir nunca “una copa mas”.

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